Se termina el año y el balance para las compañías de tecnología es mixto. Una mirada rápida a los precios de sus acciones demuestra que a pesar de los miles de lanzamientos de nuevos productos, aumento de usuarios y mejoras en general, el 2011 no fue un buen año para sus inversionistas. Quién fue el que más se valorizó (no, no fue Apple)? Quién fue el que más hizo perder a sus inversionistas? Averigüelo después de la pausa…
Empecemos con las empresas tradicionales de tecnología. Aquellas que ya existían al comienzo del año. Los grandes ganadores son los accionistas de IBM quienes vieron un aumento en sus inversiones superior al 25% en el 2011 seguidos de los inversionistas de Apple.
Dell, Google y SAP lograron pasar el año con ganancias, que aunque pequeñas, contrastan con la situación del resto de la industria.
El gran perdedor del año fue RIM, el fabricante de Blackberry. Sus acciones perdieron más del 75% de su valor mientras que el segundo puesto fue para HP pues sus acciones perdieron un poco más de 40%. En ambos casos, la competencia de Apple y Android en el mercado de tablets y celulares es un factor determinante en la pérdida de confianza de los inversionistas de estas compañías.
Pero el vaivén no se queda allí y afecta a las empresas tradicionales del mercado de tecnología corporativo como Oracle, Salesforce, Cisco y Microsoft que terminan el año con pérdidas considerables en el precio de sus acciones.
Durante el año, vimos IPOs de nuevas compañías, las cuales aprovecharon el mercado de valores para conseguir recursos. Como preámbulo a la emisión de acciones de Facebook en el 2012 compañías como Pandora, LindekIn y Groupon se unieron jugadores tan novedosos como Netflix.
Lamentablemente, a ninguno le fue bien. Netflix perdió más de 60%, Pandora 47%, LinkedIn 32% y Groupon 13% desde sus emisiones hasta el final del año minando la confianza de los inversionistas y dejando un camino rocoso para Facebook.
Esperemos que los resultados del 2012 sean mejores para las empresas del sector, aprovechando las expectativas de nuevos productos y servicios y lideradas por cambios sustanciales a industrias ya establecidas que se esperan para el próximo año