Una constante durante el último año es la caída en el valor de las acciones de los principales fabricantes de smartphones. La realidad es que el mercado, en especial entre los consumidores de estratos altos, está saturado. Semana a semana oímos acerca del lanzamiento de un nuevo dispositivo, que promete ser el próximo gran éxito para su fabricante. La realidad es que para tener un dispositivo exitoso, tiene que ser mas que bueno, tiene que tener algún factor o característica que lo diferencie sustancialmente de los demás.
Lo que hemos visto es que está escaseando la imaginación entre los fabricantes. Recientemente tuvimos la oportunidad de asistir al lanzamiento del Blackberry Q10, el dispositivo Blackberry que aún tiene teclado físico y corre BB10. Fuera del teclado, que está ahí para mantener contento al segmento que aún añora el teclado físico y que es una inmensa minoría, no hay ningún otro factor de diferenciación. Todos los fabricantes intentan vender su mercado de aplicaciones como un diferenciador, la realidad es que en todos está la misma oferta de aplicaciones y el mercado está concentrado en 2 mercados principales, Apple y Google. Todos los fabricantes intentan vender su diseño como un factor diferenciador, la realidad es que los dispositivos son todos muy similares y ya ni siquiera Apple, que es el mas agresivo en su diseño, ha logrado lanzar un smartphone que asombre a los usuarios. Todos los fabricantes intentan vender su usabilidad como un factor diferenciados, la realidad es que hay algunos detalles diferenciadores, Apple y Android tienen una curva de aprendizaje claramente mas plana que Microsoft, pero entre ellos no es un factor decisivo.
En los últimos lanzamientos, tanto de Apple, como de Samsung empezamos a notar como estos fabricantes intentan desesperadamente diferenciarse con detalles de usabilidad de poca utilidad, pero que “descrestan” al usuario. Tome por ejemplo el anuncio de “Pool Party” de Samsung. En este anuncio se pregonan una cantidad de características que realmente no marcan una verdadera diferencia para el usuario. Gestos con las manos, asistentes virtuales, trucos bacanos con fotografía y video, casi todos replicables vía software, y en verdaderamente hechos para mostrar en una fiesta, pero no para usar todos los días.
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La verdadera revolución, creo yo, debe provenir de otro lado. Los dos problemas mas grandes que tenemos los usuarios con nuestros dispositivos son primero la duración de la batería y segundo la recepción de señal de nuestros dispositivos. Es allí donde deberían estar trabajando los fabricantes. Nuestro editor Tomas Bleier hablaba recientemente del cambio que le generó el uso del Sony Experia Z, gracias a que la vida de la batería es mucho mas duradera. Los demás editores de TECHcetera, creemos que su estadística de duración de la batería se debe a que esta completamente incomunicado con nosotros, pero fíjense en el fenómeno de percepción con la mayor duración de la batería. Un fenómeno similar, en un producto diferente, hemos visto tras el lanzamiento del nuevo Macbook Air. Si los fabricantes quieren un hit, tendrán que lanzar un dispositivo cuya batería dure mas de 10 horas de uso normal, y que mantenga una buena señal continuamente.
