La llegada del Streaming ha cambiado los hábitos de los usuarios en cuanto a contenidos de consumo; así pues, ya no hay que esperar a descargar completamente un contenido para poder ir usándolo. Por lo mismo, muchos servicios como Deezer, Netflix, Crackle, Claro video y otros han sido usados aprovechando el aumento en el ancho de banda de los proveedores de servicios de Internet (ISP) y la evolución de los protocolos de compresión para ofrecer servicios de video, audio y otros bajo el modelo de suscripción mensual (o incluso de forma gratuita a cambio de anuncios publicitarios). De este modo, los usuarios pueden consumir contenidos sin necesidad de utilizar espacio de almacenamiento en sus dispositivos.
El Streaming es fantástico y, prácticamente, a todo el mundo le encanta transmitir contenidos de esta manera; pero, por lo general, cuando se hace más de una operación simultáneamente (como por ejemplo visualizar una película de Netflix en el #SmartTV y navegar por internet en la tableta) los problemas, como la intermitencia, pueden llegar a aparecer. Evitar dicha molesta intermitencia es una labor que empieza desde el mismo router, por ser el dispositivo que centraliza la comunicación, toda vez que por medio de él se conectan los demás aparatos para compartir contenidos. Por lo mismo, si alguien planea empezar a hacer streaming en casa, vale la pena:
- Verificar que el software del dispositivo que van a hacer las veces de receptor de la señal (SmartTV o similares) vía Streaming, se encuentre actualizado.
- Usar la última versión de la aplicación que se va a usar para consumir los contenidos.
- Tener un Router con puertos de transmisión de alta velocidad del tipo Gigabit, (que consigue una capacidad de transmisión hasta de 1 gigabit por segundo) y, ojalá, tecnología de WiFi de doble banda, que reduce la pérdida de datos al trasmitirlos sin cables,
Puede que los anteriores consejos suenen muy básicos; pero en muchos casos (sobre todo cuando se usan las redes inalámbricas o WiFi con una infraestructura compuesta por varios emisores, receptores, Router y Access Point, todo WiFi) la carga suele tomar más tiempo que el consumo. Si eso pasa, quiere decir que las redes WiFi están saturadas y por eso se dan las demoras en presentar los contenidos al usuario final. Es en este punto cuando las conexiones inalámbricas de los hogares muchas veces no dan abasto! En este punto existen varias opciones:
- Ser paciente, probar diferentes formas de eliminar la fuente de la interferencia que puede estar generando el problema,
- Potencializar la señal del WiFi ubicando mejor el router, o por medio de un AccessPoint,
- Re-configurar el router, cambiar las frecuencias de emisión para que no interfieran con las del microondas, sistemas de monitoreo para niños o el teléfono inalámbrico.
Por experiencia propia se que, lo más probable, es que el usuario promedio intente usar las primeras dos opciones; pero la más estable y confiable (hasta el momento dada la infraestructura de Latinoamérica) puede llegar a ser la opción de usar cables de red (RJ45) para conectar los dispositivos entre si. De sólo pensar en poner las canaletas para ocultar los cables, a gran número de usuarios les empiezan a quitar las ganas de hacer “Streaming en casa”! A mi me pasó lo mismo y decidí investigar un poco más a fondo hasta cuando llegué a descubrir que existen dispositivos que pueden aprovechar las conexiones eléctricas y convertirlas en verdaderas conexiones de red, que pueden ser usadas para internet. Después de probar este tipo de tecnología por un día, advertí que los resultados son mas prometedores usando “Internet Over Power” para mejorar el consumo de contenidos en casa.
Una vez se tiene una conexión WiFi, o cableada estable y lo suficientemente poderosa entre el #SmartTV y el Router, vale la pena proceder a configurar cada una de las aplicaciones que se van a usar como fuente o canal para consumir los contenidos a través del TV. El proceso muchas veces suele implicar una cuenta pre-existente o realizar la inscripción y activación desde un PC para que el #SmartTV quede vinculado a uno o varios servicios de Streaming.
Esta última parte, aunque suena compleja, en realidad sólo requiere paciencia para seguir el paso a paso requerido por cada proveedor y listo! En menos de nada ya se puede consumir los contenidos de manera no líneal (cuando uno quiera y en el orden que quiera). Pero nada mejor que ver al experto explicar este último paso de configuración de las aplicaciones y percibir la experiencia de consumo de contenidos en un TV con WebOS 2.0:
