Los vehículos autónomos han causado furor en los últimos 12 meses. Sabemos que Tesla, Apple y Google tienen programas para desarrollar esta tecnología. Hay que suponer que las marcas tradicionales de la industria automotriz también están desarrollando iniciativas en este sentido. Yo considero que los vehículos autónomos son el futuro de largo plazo de la industria automotriz. Pero para mi gusto, en el corto plazo, la conectividad podría resultar mas importante y trascendental.
Cuando hablo de conectividad quiero decir que en muy poco tiempo la gran mayoría de los vehículos estarán conectados permanentemente a internet. De esta manera carros, camiones, buses, entre otros, estarían convirtiéndose en uno de los principales nodos de lo que llamamos el internet de las cosas.
Las ventajas de la conectividad permanente en un vehículo no se limitan al uso obvio en el sistema de información y entretenimiento. Es claro que este caso de uso es mas que suficiente para justificar el despliegue de la tecnología. Contar con música, información, navegación, entretenimiento en línea es posiblemente el mejor argumento para vender un carro hoy. Pero creo que hay casos de uso de mayor valor en el largo plazo.
General Motors, uno de los productores de vehículos mas grandes del mundo, creó a OnStar en 1995. La oferta de OnStar incluye, entre otros servicios, seguimiento de vehículos robados y apagado remoto. Servicios tecnológicos que redundan en menores primas de seguro para los dueños de los coches. También tienen la capacidad de detectar situaciones de accidente y enviar a los cuerpos de socorro automáticamente. El valor de las vidas no tiene costo en un contexto de este tipo.
También está el caso de Automatic, un dispositivo de recolección de información que le permite analizar sus hábitos de conducción y la salud de su vehículo. Con Automatic, ud. puede comparar el consumo que logra con su carro vs. otros usuarios del mismo modelo y marca. También tiene acceso a los computadores del vehículo de manera que podrá hacer una visita mas informada a su taller. Como diría Felipe, ya no le van a decir que se le dañó “la chumacera del chicler”.
Finalmente está el caso que considero mas interesante. El rendimiento y características de los vehículos hoy son calibrados mediante algoritmos complejos a través de los computadores de a bordo. Cuando el algoritmo es mejorado, es necesario ir al taller para actualizarlo. ¿Qué sucede si esta tarea se puede hacer de manera remota? Recientemente vimos como Tesla actualizó toda la flota con la nueva versión de su software, lo cual permitió incluir algunas características de conducción autónoma. Todo sin la necesidad de ir al taller.
Llevando el argumento un poco al extremo, me puedo imaginar un futuro en el cual compramos carro, como hoy compramos celular. Será tan importante la marca, como el proveedor de conectividad. ¿Será que las Telco están dispuestas a financiar el hardware (los carros) a cambio de los posibles servicios conexos a la conectividad? ¡No se ve tan descabellado!