El dia de ayer Eset presentó su Reporte de Seguridad 2017 para la región y, a pesar de ver mejoras en algunos de los indicadores, la verdad es que America Latina sigue sufriendo por cuenta la inseguridad cibernética, al punto que cerca de la mitad de la mitad de las empresas en la región fueron víctimas de algún tipo de ataque.
Cerca de la mitad de empresas en América Latina sufrió algún tipo de incidente de seguridad informática en el 2016
Nicaragua fue el país donde se vio el mayor porcentaje de infecciones de Malware (53%) mientras que Uruguay (con un 22%) fue el que salió mejor librado.
Aunque la principal preocupación de las más de 4 mil empresas encuestadas como parte del estudio sigue siendo el Malware (56% de ellas lo mencionaron como la #1), la vulnerabilidad del software y sistemas utilizados ha pasado al segundo puesto, posiblemente por el impacto de ataques como Wannacry, que generaron disrupción en un número importante de operaciones en la región hace unos meses y porque la solución a los mismo está generalmente fuera del control de las empresas.
Y es que precisamente el 32% de los encuestados ven en el Ransonware una amenaza creciente, sobrepasando al Phishing (27%) que parece haber cedido terreno de la mano de las campañas pedagógicas que expertos y empresas han hecho para sus empleados.
Precisamente, hablando de Phishing, Ecuador (21%) tuvo el porcentaje mas alto de empresas afectadas en la region mientras que en Honduras solo un 6.5% de las empresas reportaron haber sido víctimas de este tipo de ataque.
Y claro, no es posible olvidarnos del robo de información, que es para un 43% de los encuestados como una de las principales preocupaciones.
A nivel de ataques, 49% de las empresas en la región reportaron algún tipo de ataque de Malware y 16% más alguno de Ransonware.
Tan solo el el 31% de las empresas de la region pasaron el año “en blanco” sin ser víctimas de ningún tipo de incidente de seguridad.
Solo el 12% de las empresas tiene un área dedicada a la seguridad de la información
Pero tal vez lo más preocupante del Informe es ver como solo el 12% de las empresas latinoamericanas tiene un área dedicada exclusivamente a la seguridad de la información y la mayoría de ellas aun mantiene dicha responsabilidad de la Gerencia de TI en donde compite – en tiempo y recursos – con otros proyectos.