Si hay un segmento del mundo de la tech que ha cambiado en los últimos años ha sido el de la fotografía. No sólo el surgimiento de cámaras cada vez más avanzadas en los smartphones sino, por el posicionamiento de la tecnología “mirrorless” en las cámaras fotográficas, que es el caso de la Nikon Z5 de la que vamos a hablar a continuación.
La resistencia inicial!
Cámaras con sistemas mirrorless han existido desde el año 2004 cuando Epson, sí, Epson, sacó su primer modelo al mercado. Sin embargo, de parte de la comunidad fotográfica hubo un fuerte rechazo inicial debido a tres factores:
- La Simulación: Las cámaras mirrorless no tienen ni pentaprisma, ni visor trasparente. En cambio, hacen uso de chips CCD y pequeñas pantallas LED o LCD para mostrarle al fotógrafo lo que hay en el mundo exterior. Esto contrarió a muchas personas pues, en su opinión, no era una imagen “real” ya que, estaba sujeta a lo que el sistema de procesamiento de la cámara quisiera mostrar.
- En el antiguo sistema mecánico la respuesta a las acciones era inmediata, en un sistema full electrónico, la capacidad de tomar, procesar y almacenar la fotografía entra en escena, por lo que, el procesamiento se volvió parte de la ecuación y muchas cámaras no estaban a la altura.
- Por último, no existía el ecosistema de conectividad actual, por lo que muchas de las prestaciones de estas primeras cámaras quedaban desaprovechadas y por consiguiente no se veían útiles.
Sin embargo, ya estamos en 2020 y muchas de estas variables se han resuelto pero, además, es que hay un gran cambio en el paradigma de para qué se usan estas cámaras, puesto que ya no son solo “las de las fotos” sino, que, se espera que sean herramientas de producción multimedia, por lo que tener buenas capacidades de video, fotografía, conectividad inalámbrica, memoria expandible y portabilidad son necesarias. Todo esto sólo se puede conseguir con una cámara mirrorless.
Entra Nikon!
Nikon presentó sus primeras cámaras de óptica intercambiable hace algunos años con la serie J, prácticas, muy bonitas pero, más para el usuario casual que del profesional. De ahí, para nadie es un secreto Sony tomó la delantera y ha ganado mucho terreno con sus ALPHA, Canon ha dado más bien tumbos y Nikon se puso al día con su serie Z.
Es así como, desde 2018 vemos a las Z6 y Z7 como flagships mirrorless de la marca; sin embargo, ahora quieren trabajar desde la base con la llegada de la Z5.
Se trata de una cámara de de 24.2 Mp con un sensor FullFrame, un sistema con hasta 273 fases de enfoque automático (y yo feliz con 39 puntos de enfoque en mi D600), sistema de dos memorias SD y de lo más importante ahora en este mundo de YouTubers y demás creadores de contenido, estabilización óptica de imagen de 5 ejes.
Por último, ya no incluye el (para mí) muy adaptable pero, muy menospreciado lente 18-55 sino, que ahora opta por un más “orientado a contenido” 24-50. Además, también, su app Nikon Mobile Utility para conexión con el smartphone. Ahora en Agosto, Nikon lanzó el software Webcam Utility para que esta y todas las Z puedan ser usadas como WebCam.
Tremendas reuniones de Zoom las que puede uno tener!.
Seguiremos hablando de esta cámara.
Hablemos en Twitter.
Andrés Felipe Sánchez