Dicen por ahí que las herramientas de Inteligencia Artificial (IA) ya pueden hacer por nosotros todo lo que se nos ocurra y por eso no tiene sentido invertir más tiempo de lo necesario en procesos que hoy en día pueden tomar segundos.
Pensemos…
¿Necesita redactar un texto? ¿Crear una imagen publicitaria? ¿Organizar datos numéricos para propósitos corporativos? ¿Hacer predicciones estadísticas sobre alguna situación en particular?
La lista de posibles soluciones y herramientas es infinita y ya no cabe preguntarnos si tanta magia es cierta o si las tecnologías de IA pueden superar lo que somos capaces de hacer los seres humanos. Esas respuestas ya se han dado suficientemente y ahora tal vez la reflexión más relevante es sobre lo que podemos hacer con ese mundo de posibilidades.
Si de alguna manera ya se está cumpliendo la profecía de que las máquinas vendrían para reemplazarnos, ahora lo que nos corresponde es, como siempre, adaptarnos y convertir en oportunidades lo que en principio puede parecer una amenaza.
A pesar de todo, llevamos la ventaja
Por ahora, nadie parece saber con claridad si las máquinas tienen el nivel de autonomía del que gozamos los seres humanos, pero lo que sí es claro es que, dado nuestro potencial para aprovechar los recursos disponibles, tenemos una ventaja considerable y un universo de herramientas que nos pueden facilitar la vida.
Ahora que casi todo está inventado, tenemos el poder para potenciar nuestros logros y hallar soluciones a situaciones que antes parecían inmanejables.
He aquí algunos ejemplos sueltos:
- Piense en cualquier tarea que le cuesta hacer o que le toma mucho tiempo, lo que sea. Vaya a Google y pregúntele si ya existe una herramienta de IA que le sirva para hacer esa tarea de manera mucho más fácil. De seguro, ya está inventada y sólo basta con investigar.
- Si tiene algún negocio que depende mucho de su conocimiento, su experticia y su juicio humano para tomar decisiones, puede estar seguro (a) de que también existen recursos tecnológicos que ya hacen todo eso mucho más rápido de lo que usted lo puede hacer. ¡Pero no tema! Aprenda a usarlo y piense que eso, más que un riesgo, es un medio maravilloso para multiplicar su productividad y la calidad de su trabajo.
- ¿Es usted de las personas a quienes les apasiona aprender? ¿Tiene además la capacidad de enseñar? Capacítese en el uso de herramientas de IA, hágase un experto en ellas y entregue ese conocimiento a otros por medio de las redes sociales o de un sitio web.
- Si todavía está luchando por aprender algún idioma y cada día se reprocha no haberlo logrado, tómese un tiempo para investigar sobre la infinidad de recursos tecnológicos que le pueden ayudar en tareas como aprender vocabulario, practicar sus habilidades conversacionales en tiempo real, practicar la escritura o mejorar su capacidad de escucha. ¡No lo dude! Los recursos existen, así que no hay excusa y tal vez lo único con lo que tenga que trabajar es con su propia capacidad para enfocarse y cumplir la meta.
En resumen, recuerde que el mundo hoy ofrece posibilidades ilimitadas y que nuestro papel consiste en utilizarlas para mejorar nuestra experiencia personal, académica y corporativa. Piense que aquello que no existe es lo que no hemos decidido crear o a lo que no le hemos dedicado el tiempo y la atención suficientes.
Prácticamente todo está a nuestra disposición y la Inteligencia Artificial, como tantas otras tecnologías son una fuente interminable de oportunidades.
Ahora cuéntenos, ¿para qué cree que le puede servir la Inteligencia Artificial?
