Tal como en algún momento lo dejaban entrever la película del “juego del dinero” (en inglés “money game”), claramente, los datos y los deportes tienen una relación muy estrecha, bien sea el béisbol, el baloncesto, el tenis, el fútbol o similares.
Pero, cómo se relaciona el futbol con la Inteligencia Artificial?
Indudablemente la Inteligencia Artificial, el software y el hardware están cambiando los hábitos de los deportistas, las organizaciones y hasta de la audiencia que, cada vez quiere saber más del deporte que genera grandes pasiones y, obviamente, mueve millones de dólares en ganancias.
Así las cosas, la Inteligencia Artificial puede se una gran “coequipero” para un entrenador, ya que puede analizar grandes cantidades de datos, como estadísticas de partidos, rendimiento de jugadores, tácticas de un determinado equipo y demás data requerida imperativamente para ayudar a los equipos a tomar decisiones informadas.
Los algoritmos de aprendizaje de máquina pueden analizar y predecir el comportamiento de los jugadores, lo que puede ayudar a los entrenadores a planificar estrategias, tomar decisiones tácticas y hasta asesorar a los reclutadores para saber a quién deben reclutar para una determinada posición (de acuerdo a su rendimiento, histórico estadístico y otros indicadores relevantes), a una temporada o, incluso para una copa o torneo.
Los entrenadores inclusive pueden usar la Inteligencia Artificial para idear los entrenamientos, con todo y su consabida preparación física, al monitorear la actividad física y la salud de los jugadores y adaptar los programas de entrenamiento y hasta de recuperación. Ahora bien, los wearables o dispositivos de seguimiento y análisis de datos pueden proporcionar información extra en tiempo real sobre la condición de los jugadores, lo que puede ayudar no sólo a prevenir lesiones sino a identificar áreas de mejora y desarrollar planes de entrenamiento personalizados.
Hasta la experiencia del usuario puede verse mejorada gracias al uso de la Inteligencia Artificial al generar nuevos ángulos y maneras para visualizar las transmisiones e, incluso, los chatbots de AI pueden proporcionar información en tiempo real sobre los resultados de los partidos, la alineación de los equipos, las estadísticas de los jugadores, etc. Ahora bien, los expertos afirman que hasta el momento, estamos viendo los primeros pasitos de lo que se puede hacer gracias al uso redes neuronales convolucionales en conjunto con visores de realidad mixta (aunque el método aún está en una etapa muy experimental).
En el campo o cancha, la Inteligencia Artificial puede ayudar a los entrenadores (haciendo las veces de un coach virtual) a analizar el partido por medio de consejos prácticamente en tiempo real y, esto puede ayudar a mejorar la coordinación y la eficacia táctica del equipo.
Hasta el manejo de las cámaras en el deporte está usando Inteligencia Artificial para estar siempre donde sucede la acción y, así tener un seguimiento más adecuado de lo que sucede en el campo de juego (hasta en el nivel aficionado).
Ahora bien, los profesionales tiene acceso a las grandes herramientas (como dirían en inglés “the big guns”) que ayudan al arbitro por medio del VAR (Video Assistant Referee) que, no es más que una serie de cámaras de video y el respectivo software de análisis para asistir a los jueces para tomar decisiones precisas en situaciones de juego controvertidas como: goles, penales, tarjetas rojas, fuera de juego y hasta lo que pasa a veces cuando la pelota sale del campo y se acerca al banco de algunos equipos.
Finalmente, aún hay que esperar como la reglamentación, la audiencia y el deporte mismo se ponen al día con todas estas nuevas herramientas comandadas por la Inteligencia Artificial, el software y el hardware que hace posible la interacción con el deporte en el día a día.