Hace poco hice la reseña de los nuevos Samsung Galaxy Buds 2 Pro. En esta, no solo hablé de como su sonido de 24 Bits buscaba cambiar el panorama de los audífonos True Wireless sino, que, además eran de los primeros audífonos de este tipo que eran ampliamente recibidos y valorados por la comunidad audiófila.
¿Audiófilos?
Si, es una palabra que denota un tipo de persona que es fanático del buen sonido. Alguien que sabe la diferencia entre Macintosh (el computador) y los McIntosh, empresa creadora de algunos de los dispositivos de sonido de mayor claridad y más caros en el mercado. Este tipo de persona sabe que existe toda una cultura de marcas, tiendas especializadas y accesorios que busca entregarle a la persona el mejor y más claro sonido posible.
Y llega China
“ChiFi” es una expresión que hay en el mundo audiófilo que se refiere a la explosión de IEM que ha llegado desde el país asiático en los últimos años y que ha llenado el mercado con muchas opciones HIFi, pero a un precio muy económico.
A diferencia de otros segmentos tecnológicos, los IEM o In Ear Monitors chinos, gozan de muy buena reputación en la comunidad y, en muchos casos, le hablan “de tu a tu” a otras ofertas del mercado mucho más costosas.
Lo que pasó fue que, de hecho, hace unos cuantos años hubo un cambio en la tecnología sobre como se genera el sonido en los audífonos. Todo estos usan drivers dinámicos para transmitir y crear dicho sonido, este es básicamente un alambre de cobre amarrado a un imán integrados a una bocina. Es por eso que, para sonar bien, muchos sistemas necesitan un buen tamaño y dar lugar a todos estos componentes.
Sin embargo, hay otra forma de hacerlo y es a través de diafragmas planos, es decir un capa de plástico pequeña con un material conductor entre dos pequeños imanes. La idea es que así se tenga un control más preciso del sonido. Pero esta tecnología, a pesar de ser muy vieja, poco se había podido perfeccionar en dispositivos tan pequeños y es exigente en términos de energía, lo que no lo hace ideal para audífonos Bluetooth.
Pero en China, como dijimos, hubo una explosión de marcas, accesorios y dispositivos que lograron eso y el mercado se comenzó a inundar de IEM. Para comenzar a entender el fenómeno hay que tener claros tres puntos:
1: No se trata de un juego de marcas conocidas. No hay IEM de Sony, AKG y mucho menos Apple (marca que produce los peores audífonos con cable). Así que no espere encontrar alguno de una marca que encuentre popularmente en la calle.
2: Son MONITORES, y esto es clave. Al ser MONITORES; lo que buscan es claridad de sonido, de todos los sonidos, sin premiar bajos o agudos. La mejor experiencia de sonido posible.
3: Son económicos y los hay de todos los gustos y colores. KZ, Salnotes, QDC, BQEYZ, quizás no sean marcas que uno encuentre en un Ktronix pero, hacen sus audífonos bien y, en muchos casos, tan baratos que uno puede permitirse un par de errores, antes de encontrar los perfectos para uno.
¿Para quién son?
Se pueden olvidar de Cancelación Activa de Ruido, Sonido Espacial, Carga rápida y Emparejamiento Sencillo. Los IEM del movimiento Chi-Fi son para las personas que buscan la mejor calidad de sonido y punto. Lo demás, es adorno.
Se pueden intercambiar los cables, mejorar con un DAC que funciona como adaptador para iPhone o Android e incluso buscar opciones de colores y personalización. Se trata de todo un universo lleno de lenguaje propio y mucha cultura.
¿Suenen mejor que unos Airpods? Si! ¿Suenan mejor que unos Buds? También! De hecho desde hace rato venimos escribiendo del retorno de los audífonos con cable como una tendencia y más que eso con propuestas como esta una que, no solo son moda, sino que suenan bien, muy bien
A escuchar buena música, con la llegada del Chi-Fi.
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Andrés Felipe Sánchez