Créalo o no más del 60% del tráfico de internet en el 2013 no fue generado por humanos sino por robots. Robots sin cuerpo, robots digitales, programas que navegan y buscan llenar de spam los más de 1,000 Millones de páginas web que existen en la actualidad y que buscan acceso a los principales productos y servicios bien sea para propagar publicada o para robar información. La solución para diferenciar un humano que se está inscribiendo en un servicio de uno de estos robots ha sido un sistema conocido como CAPTCHA – Completely Automated Public Turing test to tell Computers and Humans Apart (traduce algo así como Prueba de Turing Completamente Automática y Pública Para Diferenciar Computadoras de Humanos). Son esos pequeños cuadros con 2 textos que no son tan fáciles de entender, como este:
(si lo decifra, le encargamos el dato)
Los CAPTCHAs han sido un mal necesario que lamentablemente se han venido complicando a tal punto que es súper común que una persona deba solicitar 1 o 2 CAPTCHAs nuevos antes de poder comprobar que es real y de carne y hueso. Pues bien, Google ha anunciado la implementación de un sistema – el No CAPTCHA reCAPTCHA, que promete simplificar el sistema de validación de humanos utilizando una opción de 1 sólo click (en la mayoría de los casos).
La idea de Google es incorporar un componente analítico que evalúe el nivel de riesgo del registro basado en la información provista en otros campos, las direcciones IP desde donde se hace el registro, las cookies que ya tiene instalado el browser y cientos de variables adicionales. Si el nivel de riesgo es bajo, el usuario podrá certificar que no es un robot con un sólo. De lo contrario, el sistema le asignará un reCAPTCHA tradicional. Las pruebas hechas por la compañía con partners como WordPress, quienes ya han instalado el API gratuito, han arrojado entre un 60% y un 80% de usuarios que logran registrarse sin necesidad de decifrar las confusas imágenes y que con un sólo click han ahorrado tiempo en el proceso.
Pero además, el sistema permite una implementación móvil como nunca antes vista, incrementando los niveles de seguridad de millones de sitios que en su versión para smartphone no tenían protección alguna.