Los llaneros solitarios, investigadores de seguridad o hackers como la gente los llama (aunque este último sobrenombre para muchos posee una connotación negativa), suelen jugar papel importante en el ecosistema de innovación. Este tipo de genios intelectuales que muchas veces nos hacen maldecir en voz alta cuando realizan ataques masivos que afectan la infraestructura pública! También suelen impulsar a las compañías a desarrollar más y mejores esquemas de seguridad e inclusive, nuevas formas nuevas de interactuar con dispositivos tan habituales como los cajeros automáticos, las maquinas expendedoras (en inglés vending machines), las computadoras, smartphones, tabletas y sus respectivos programas o aplicaciones.
Existe un imaginario colectivo bastante arraigado que lleva al común de los ciudadanos a conocer sólo el lado oscuro de los hackers que los aterroriza por su poder pero, la realidad, es que muchos de ellos en la actualidad trabajan en pro de la sociedad. Inclusive existe una tendencia mundial de las grandes corporaciones las cuales motivan a dichos investigadores de seguridad o hackers a poner a prueba las vulnerabilidades de sus sistemas y reportarlas a cambio de recompensas. Estos casos se han evidenciado en gigantes como Facebook y otros grandes de la industria que premian a los que denuncian las fallas en los sistemas por medio de un procedimiento estándar.
Tal como decía Barnaby Jack: “algunas veces hay que demostrar una amenaza para provocar una solución”, para muchos teóricos, los hackers pueden ser el equivalente “al sistema inmune de la era de la información” que esta encargado de encontrar las enfermedades y hacer las publicas para impulsar a los entes encargados a generar una cura. Inclusive en campos como la guerra, con el nivel de automatización militar al que se ha llegado en la actualidad, la dependencia que hoy tiene el mundo es tal que se ha comprobado que resulta más fácil derrotar al “enemigo” atacando su infraestructura informática y de comunicación, que recurriendo a las estrategias de guerra tradicionales que tienen un costo más alto en materia de vidas humanas.
Gracias al cielo muchos hackers piensan que al igual que en los comics: “con un gran poder, viene una gran responsabilidad”! Por lo mismo, siempre es bueno saber que existe la tendencia hacia el hacking benigno conocido como “grey hat” o “full disclosure” que enfatiza la parte moral de la libertad del conocimiento y, aunque se rompen algunas leyes, se hace para impulsar mejoras en los procesos de computación sin dañar a nadie.
La validez de lo anterior siempre dependerá del observador, ya que no para todo el mundo “el fin justifica los medios”. Finalmente creo pertinente traer a colación una charla de “Keren Elazari” en “TED Talks” que puede ayudar a más de uno a sacar sus propias conclusiones.
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