Por si no lo sabía, debemos mencionarle que su futura casa podría llegar a tener una base que pueda almacenar energía de los paneles solares en su techo (sin necesidad de baterías separadas). Y es que según han notificado recientemente, los ingenieros del MIT desarrollaron la nueva tecnología de almacenamiento de energía, un nuevo tipo de hormigón, el cual está basado en 2 materiales antiguos; el cemento, que se ha usado durante miles de años, y así mismo, el negro de carbón, el cual viene siendo un polvo negro utilizado como tinta para los Rollos del Mar Muerto alrededor de 2000 años atrás. ¡No se puede perder ningún detalle al respecto! en TECHcetera le traemos los mejores datos.
Ingenieros del MIT desarrollaron la nueva tecnología de almacenamiento de energía
El negro de carbón transporta la electricidad, y los ingenieros pudieron descubrir que si se mezcla con cemento y agua de una manera específica, crea una red larga y ramificada de “cables” de carbón conforme el cemento se va endureciendo. Esto logra convertir el material en un “supercondensador”, un dispositivo que almacena una carga eléctrica. Franz-Josef Ulm, profesor de ingeniería civil en el MIT y uno de los autores de un nuevo estudio sobre la tecnología, ha mencionado que de repente existe un material que no solo puede transportar carga, sino que incluso, tiene la capacidad de poder almacenar energía.
Hay que tener presente que a diferencia de una batería, que trabaja convirtiendo la energía química en energía eléctrica, un condensador no se degrada con el tiempo ni tampoco pierde la capacidad de mantener la carga. (Un supercapacitor es un tipo de capacitor que tiene la oportunidad de poder contener una carga muy grande). Según han dejado saber, un capacitor tampoco requiere los materiales costosos y éticamente cuestionables que se utilizan en las baterías de iones de litio, como el cobalto y el litio. Esto producto de que el negro de carbón es económico, los investigadores han mencionado que el proceso añadiría poco al costo de hacer concreto. Lo que podría llegar a ser una solución para uno de los primordiales desafíos en el aumento de la energía renovable; dado que la energía solar y eólica no siempre están disponibles, es fundamental construir de forma rápida un almacenamiento más accesible para poder apartarse de los combustibles fósiles.
Ahora bien, los ingenieros se inspiraron para trabajar con cemento en parte porque la producción de cemento posee una gran huella de carbono, y proporcionar un segundo propósito de apoyo a las energías renovables puede hacerlo más sostenible. Todo parece indicar que el proceso también podría utilizarse con alternativas de cemento más nuevas que disminuyan las emisiones de la fabricación.
Lo que deja ver que, en una casa, una base hecha de este material podría llegar a almacenar tanta energía solar (conectada a través de cables al techo) como la que utilizaría la casa en un día. Así mismo, en un parque eólico, podría usarse en la base de aerogeneradores. Incluso, el concreto también lograría usarse para realizar carreteras que puedan cargar vehículos eléctricos mientras conducen. En el novedoso estudio, los investigadores hallaron que los capacitores podrían diseñarse para cargarse lentamente, como en una casa, o descargarse de forma rápida, como en un cargador EV.
Finalmente, se debe mencionar que luego de probar una versión pequeña en el laboratorio, el equipo ahora planea escalar a tamaños mucho más grandes. Según ha mencionado Ulm, el primer prototipo podría estar potencialmente listo dentro de unos 18 meses.