Los padres de familia le hablan a los lectores de TECHcetera y esta es una de sus historias:
Esta película se puede considerar como un complemento muy acertado de todo lo que representa el Juego Lego. Durante mucho tiempo este juego se ha posicionado entre la población infantil mundial como un elemento de diversión y, para los padres, como una herramienta didáctica que desarrolla habilidades y destrezas muy importantes para el desempeño personal en los niños y niñas.
Es evidente que el juego sigue una línea de entretenimiento y de precepto familiar creada desde la concepción de sus fundadores e, incluso, desde la definición de su nombre “Jugar Bien”, y desde su creación en un taller de carpintería.
A través del tiempo se observa una evolución muy interesante del Juego Lego, adaptándose a las diferentes situaciones y contextos propios de los últimos tiempos, llegando en la actualidad, a explotar de manera brillante la combinación de: lo didáctico, lo fantasioso, los sentimientos, la tecnología e incluso una serie de valores que aportan a la formación integral de la población infantil.
Si bien, es cierto que se considera una película animada, resulta muy ingeniosa la inclusión de actores reales en la trama, generando una interacción atractiva para el público en general y, evidenciando el éxito de este juego, no sólo por los premios obtenidos (Juego del Siglo), innumerables reconocimientos sino, por su expansión a la pantalla gigante y, a todo un concepto que involucra la imaginación, la creatividad y la infinita proyección de lo que se puede llegar a construir alrededor de este juguete.
Por último, es necesario dimensionar el desarrollo y crecimiento del juego a nivel mundial, convirtiéndose en un elemento integral que para los niños representa diversión, para los padres elemento didáctico, para las industrias una oportunidad de crecimiento económico y, para el gremio académico, un elemento que desarrolla y potencia habilidades motrices, cognitivas y de pensamiento, fundamentales para cualquier ser humano.
