Mientras nos encontrábamos celebrando el año nuevo, un aspecto importante en el mundo del entretenimiento estaba y esta sucediendo, y es que Steamboat Willie, (la primera caricatura animada en presentar a Mickey Mouse), saldrá del control implacable de los abogados de Walt Disney Company y pasará a ser de dominio público.
Y aunque no lo parezca, se trata de un tema complicado, y es porque el tema del copyright es complicado y depende de cada país establecer las reglas. ¡Los detalles sobre este inherente tema los traemos aquí en TECHcetera!
Todo lo que debe conocer sobre la primera caricatura en presentar a Mickey Mouse
Ante esto, James Grimmelman, un profesor de derecho digital y de la información de la escuela de leyes de Cornell señaló, “No hay afirmación acerca de copyright que no contenga una excepción. Es diferente según el país en el que se publicó originalmente o el idioma en el que se publicó originalmente. Puede variar dependiendo de si se publicó en una revista o en un libro. Cada afirmación tiene alguna excepción o algo más que puedas decir al respecto”.
Así, los países de Europa (con excepción de España y Bielorrusia) reconocen la expiración de la protección del copyright 70 años después de la muerte del autor, y en Canadá son apenas 50. No así en Colombia por ejemplo, en donde son 80, o en México, en donde son 100 años.
Según se conoce, tradicionalmente, el copyright existe por un tiempo determinado. Ese tiempo ha cambiado a lo largo de la historia. Inicialmente en Estados Unidos (que calcula el término por la fecha de publicación y no por la muerte del autor) eran 14 años, más otros 14, y en el año de 1976 pasó a ser 70 años. Pero en los 90, cuando las primeras obras, de 1923, empezaban a entrar en el dominio público, el Congreso de EE.UU pasó la Sonny Bono Copyright Extension Act, que añadió 20 años al término del copyright.
Cabe señalar que eso tuvo el efecto de pausar la entrada de nuevas obras al dominio público. Esa pausa terminó en el año de 2020, cuando volvimos a tener obras entrando al dominio público. A partir de ahí, deberíamos tener obras entrando al dominio público cada año.
Grimmelman ha señalado, “La concepción más errada acerca del copyright es que es un asunto de todo o nada. En EEUU se contempla la doctrina del fair use, que permite citar, transformar obras, para crear obras nuevas. Así que el copyright no es solo algo que permita a un autor detener alguien que quiera usar su obra, sino que deja un espacio para que otros adapten y construyan a partir de obras existentes”.
Entonces, es de resaltar que es bajo ese referente que en el mes de enero del año 2020 entraron a ser de dominio público obras como novelas de Agatha Christie, La Montaña Mágica de Thomas Mann entre otras, y que en enero del año de 2021 se volvió de dominio público El Gran Gatsby. Y es por eso que a partir del primero de enero de 2024 lo será Steamboat Willie.
El caso de Mickey Mouse
Si hay algo importante que mencionar es que, entonces, sí: Los primeros dibujos animados de Mickey Mouse, el mencionado corto Steamboat Willie, fueron publicados a comienzos de los años 20.
Pero, cabe señalar que aunque esa obra entra al dominio público, no es el caso de muchas otras cosas que Disney ha hecho en las que sale Mickey Mouse.
Y hay que tener presente que, ciertamente no incluye a la versión moderna del personaje, con colores, piernas distintas y otra voz, ni incluye sus trajes o las versiones que se observan en Disneyland, ni muchas otras obras que son de Mickey, pero no del dominio público.
Por lo tanto, hay que dejar claro que aunque alguien podría usar conceptualmente el Mickey de la era de Steamboat Willie para su propia historia, no puede adaptar ninguna otra caricatura de Mickey Mouse o la representación mucho más evolucionada (y familiar) del personaje de los últimos 95 años.
Para ser más precisos, Mickey Mouse: el corto en el que hizo su primera aparición entra al dominio público, con lo que se podría hipotéticamente proyectarlo en un cine club, por ejemplo. También podría usar a la versión de Mickey que aparece allí para animar o incluso, rodar su propia película. Pero, Mickey como marca registrada, continuará siendo propiedad de Disney y eso logra evitar que otros lo exploten para sacar provecho económico.
Ante todo lo ocurrido, se puede mencionar que lo importante de esto es que liberar obras que ya cumplieron su ciclo, estimula la creatividad de autores que pueden aproximarse a ellas de manera segura, adaptarlas y así mismo, renovarlas.