HTC produce unos de los smartphones más hermosos del planeta. Sus materiales, sus diseños y el performance de los mismos lo han puesto siempre aparte del “mundanal ruido” generado por los más 1,041 competidores que produjeron teléfonos inteligentes en el 2015.
Y sin embargo, su market share cae trimestre tras trimestre (Gartner le atribuye una participación de mercado de menos del 2%, una cifra cercana a la de Windows en el mercado de dispositivos móviles), su capitalización de mercado no es ni el reflejo de lo que fuera hace 5 años (el precio de su acción ha caído 94% desde Abril de 2011) y la compañía completó 3 trimestres consecutivos perdiendo plata (USD 101 Millones).
No es necesario ser un genio para saber que las cosas no van bien. Tan poco es necesario ser súper inteligente para entender que si la compañía sigue haciendo lo mismo – me refiero a lo que esperamos ver del HTC One M10 ahora en Marzo – los resultados serán los mismos y no habrá una recuperación importante de quien fuera hace pocos años uno de los referentes de la industria. Lo que sí es difícil, y para lo que sí se necesita ser inteligente (y sagaz, arriesgado, concreto y hasta visionario), es para “encontrarle la comba al palo”, como decimos en Colombia, y sacar a la compañía del círculo vicioso que lo tiene cerca de un estado vegetativo para el cual le queda un poco más de 1 año en caja (USD 1,400 Millones).
Así es como la compañía parece haber decidido apostarle todo al tema de realidad virtual.
Dentro de los 3 grandes lanzamientos del año en el mercado de Realidad Virtual está el HTC Vibe, una consola premium que competirá con Facebook (y su Oculus Rift) y con Sony (quien lanzará al mercado su Sony VR).
El día de hoy la compañía ha anunciado la apertura de la preventa del Vibe, la cual incluye el casco, 2 controles, el sistema de rastreo con lasers y 3 juegos y aplicaciones por sumas que van desde los USD 799 en Estados Unidos hasta los USD 992 en Japón (el precio en Europa será de 899EUR).
El sistema, que fue realizado en conjunto con la gente de Valve (los dueños del aclamado juego Half-Life), permite a los usuarios moverse libremente por un espacio físico de hasta 3 x 3 mts en los que el sistema los seguirá (a diferencia del Oculus y el Playstation VR que requieren de un control físico de videojuegos con el que se simula el movimiento) a la vez que es “operado” por el movimiento del casco y la interacción con objetos vía los 2 controles manuales.
Además de los USD 799, los usuarios del Vive tendrán que tener un PC (de altas especificaciones) compatible para su funcionamiento, por lo que el dispositivo está enfocado – al igual que su competencia – al segmento más alto del mercado. Pruebe probar si su PC está listo en este link.
“Make or Break” dirían los Estadounidenses al referirse a la apuesta que ha hecho HTC. Es su oportunidad de entrar liderando un nuevo segmento del mercado de entretenimiento digital, uno que los expertos estiman puede llegar a USD 70,000 Millones para el 2020 y en el que parecen estar todas las apuestas. La compañía parece haber entendido que si quiere que el futuro del VR no sea como el del 3D (que murió por falta de contenido), debe aliarse con alguien que pueda producir ese contenido y que tenga además acceso al mercado de quienes estarían dispuestos a pagar por él. Por eso la alianza con Valve – que tiene más de 125 millones de clientes en su mercado de juegos – es tan importante.
El HTC Vive estará disponible en el mercado el 5 de Abril.