Además, la compañía ha decidido comenzar una campaña mediática en la que explica las razones de su denuncia, el por qué ha decidido interponerla y lo que espera de Apple y de los entes de control.
Dicha campaña incluye un post del Cofundador y actual CEO de la compañía, Daniel Ek, el cual puede leer siguiendo este link y un video animado en el que explica la situación:
Para Ek el rol dual de Apple -por un lado es quien provee la plataforma de iOS y por otro es un competidor más en ciertos productos, como el de la Música con Apple Music- genera una ventaja injusta y limita la libre competencia.
Ek menciona la comisión de 30% que cobra Apple a sus desarrolladores sobre cualquier venta (incluyendo upgrades) que se hagan desde un dispositivo iOS. Y dice que dicha comisión los ha mantenido en una encrucijada: tener que inflar los precios para los usuarios de Apple, con lo que no serían competitivos vs. Apple Music, o no poder ofrecer el upgrade directamente desde el app de iOS, algo que les impide monetizar un porcentaje importante de sus usuarios (no se le olvide que hoy hay más de mil millones de usuarios de iOS activos a nivel mundial).
Pero no se queda ahí. El ejecutivo dice que Apple va más allá al no permitirle a Spotify acceso al resto del ecosistema Apple como el HomePod, el Apple Watch y el mismo Siri y que incluso les limita las comunicaciones que pueden tener con sus clientes.
La denuncia llega en el peor momento posible. No sólo porque Apple se apresta a lanzar un nuevo servicio de streaming que competirá con Netflix y Hulu y Disney Go (les contaremos todo el 25 de Marzo hacia el medio día) sino porque en pleno comienzo de la campaña electoral para la Presidencia de los Estados Unidos 2020 varios de los precandidatos – como Elizabeth Warren – han puesto sobre la mesa la necesidad de regular lo que se conoce como el Big Tech, entre los que se encuentra Apple (escribí de dicho tema hace un par de días –en este post– por si le interesa) y esta dualidad de dueño de plataforma / competidor es uno de los puntos en los que hace hincapié la actual senadora.
Spotify no parece pedir nada irracional. Sólo condiciones para competir de tú a tú.
Sin embargo la decisión puede que no sea tan fácil de tomar para Apple quien se ve cada vez más enfocada en la generación de contenido y servicios, áreas cuyos ingresos son los que más crecen y sobre los cuales Tim Cook & Co. tienen las esperanzas puestas ahora que estamos en la era post-iPhone.
¿Qué opina de la posición de Spotify? ¿Está pidiendo demasiado o son justas sus exigencias? ¿Abre esta denuncia la puerta para que los políticos de Europa -y otras latitudes- tomen cartas en el asunto? ¿Peligra, entonces, el modelo de App Store de Apple?
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