Elon ha estado a cargo de X por un año. Un año desastroso. Un año de traspiéses, de escándalos, de libertinaje y de desmadre. Un año en el que los anunciantes han huido, los trolls han vuelto y la verdad se ha disipado.
Musk destruyó el sistema de verificación de cuentas, cambiándolo por un sistema en el que quien pague puede decir lo que quiera y hacerse pasar por quien quiera. Musk destruyó el sistema de reporte de contenido de odio, reemplazándolo por uno de “notas comunitarias” en el que el post se queda, se puede compartir y se puede monetizar pero con una leyenda inferior que invita a los usuarios a dar contexto.
Para ser justos Musk convirtió a Twitter -la plaza pública en donde todos podían expresarse bajo unas reglas- en X: la plaza pública llena de mendigos, borrachos y drogadictos por donde todos pasan y en donde el que más grite y más cosas ilógicas vocifere será el que más amplificación obtenga.
Eso ha hecho que los ingresos se hayan desplomado. Sí, la mayoría de los anunciantes que se fueron han “vuelto” pero ya no invirtien $80.000 como antes sino montos que están por debajo de los $1000. Mire este análisis de Reuters.
Para el usuario del común la situación es sencilla: hay más odio, más controversia, más “puntos de vista” (sin ningún tipo de control o de verificación), más gritería y más interacciones. Pero nada pasa.
Menos usuarios, sí. Pero usuarios que pasan más tiempo. La compañía ha informado que diariamente hay “medio billón de publicaciones” (en billones gringos) y cien mil millones de impresiones y que el usuario promedio pasa 32 minutos en ella.
El Futuro de X
Musk sueña convertir a X en la única aplicación que usted necesite. No solo para tener conversaciones, sino para todo. Como lo es WeChat en China. Musk quiere X compita con iMessage, con Messenger y con WhatsApp y por eso está lanzando llamadas y videollamadas. Musk quiere que X compita con Venmo, con Zelle y con todas las fintech del momento. Por esta pidiendo una licencias para ser una entidad bancaria. Musk quiere convertir con NewsWire y con las cadenas de noticias, periódicos y demás. Por eso está empujando a que “todos los usuarios sean periodistas ciudadanos”, lamentablemente sin filtros, sin proceso de validación de la información, sin nada. Musk quiere que X compita con LinkedIn y que sea aquí que la gente consiga trabajo.
Pero para eso la compañía tiene, primero, que sobrevivir. La compañía está en la mira de la autoridades Europeas por su manejo del conflicto Israel, Hamás, Palestina. Y se avecina una campaña electoral en Estados Unidos en que el todo parece indicar la “pelea será sin guantes”.